lunes, 25 de mayo de 2009

SEVILLA SE HUELE A TRAVÉS DE UN RESPIRADERO...

Como dijo Don Rafael Díaz Palacios, tras que Sergio Mauriño le ofreciera el martillo de San José de La Montaña, "que no os engañen con el azahar o el incienso, el verdadero olor de Sevilla es el que sale por un respiradero".

Fotografía: Ernesto Naranjo
Reservados todos los derechos. Prohibida su reproducción sin consentimiento previo del autor.

SOLEADO AUTORRETRATO

Fotografía: Ernesto Naranjo
Reservados todos los derechos. Prohibida su reproducción sin consentimiento previo del autor.

ME ALEGRO DE VOLVER A VERLE...

Fotografías: Ernesto Naranjo
Reservados todos los derechos. Prohibida su reproducción sin el consentimiento previo del autor.

sábado, 23 de mayo de 2009

'CAMPITO', LA MUSA Y EL SÍNDROME DE STENDHAL

Ayer, 21 de Mayo de 2009, -digo la fecha porque va a quedar para los anales de la historia- la Monumental Plaza de Toros de Las Ventas del Espíritu Santo fue testigo de su historia. Don José Antonio Morante Camacho, "Morante de La Puebla" sentó cátedra en ella con su antológico toreo de capa.

Rubén Pinar recibía la confirmación de alternativa de manos de su Padrino Morante, actuando como testigo, José María Manzanares. Las borricas de Juan Pedro Domecq estaban mandando al traste una tarde muy esperada por los aficionados. En la primera parte de la corrida sólo pudimos ver una verónica de morante que sirvió para mandar el astado a lamer albero y consiguiente y consecuentemente ser devuelto. Salió un sobrero de José Vázquez que no valió para nada, excepto para que Morante nos dejara detalles de torería añeja evocando a Joselito y Belmonte. El tercero bis, fue también de José Vázquez, porque el de Juan Pedro Domecq hubo de ser devuelto por el exceso de casta, nobleza y fuerza que poseía (he intentado volcar toda mi ironía en esta frase).

La tarde estaba siendo tediosa totalmente, salió Alboroto, que tenía visos de dejar la tarde en todo lo contrario a su nombre. Pero Morante quisó rendir homenaje al nombre de esta borrica, y lo consiguió. José Antonio quería enamorar y lo hizo cuando nadie daba un céntimo por el toro, pues era bastante huidizo. Morante logró embeberlo en la doctrina de su percal para administrarle cuatro verónicas y una media en las que el propio torero se asustó al oír rugir a los 16.000 leones que tuvieron la suerte de paladearlo. Así terminó de enseñarle al astado como se hacían las cosas para llevárselo al caballo evocando al Gallo y a Chicuelo y fundiéndolos en uno, galleo por chicuelinas, fueron cuatro lances ejecutados con mucho mimo que no fueron suficientes para dejar las cosas en su sitio, así, Morante le espetó una verónica y media de corte campero, no le hacía falta más.

El de La Puebla del Río pensaba que el toro no le llegaría muy sobrado de fuerzas a la faena de muleta, así decidió sacarle lo que tenía en sus adentros con el capote. Y aquí, en el primer quite se vivieron los pasajes más bellos. Le propinó cuatro verónicas, cuatro, a cuál mejor y más lenta. En la cuarta se pararon los relojes, se quebraron las gargantas, se partieron las muñecas en un baile por sevillanas.. Las firmó con una abelmontada media a pies juntos y esperando la embestida del burel. Tras el segundo pinchazo, que no picotazo, quitó al toro con dos chicuelinas con el garbo torero que le caracteriza, le añadió además una revolera que fundió con una larga cordobesa que acabó con el cuadro. Las Ventas en pie pero a sus pies, y Morante, brazos en jarra con el capote recogido en un brazo y la montera en la mano contraria haciendo la reverencia y mostrando el respeto que profesa hacía la plaza más importante del mundo.

Ordenó rapidez y eficacia a "Lili", Araujo y Pepín Monge en el tercio de banderillas, y Rafa Cuesta recuperándose de su cornada con la mejor medicina que es el toreo de su maestro.

Las Musas estaban presentes en la plaza y se personaron en la figura del referente de belleza española, la deslumbrante Paz Vega, que contempló lo acaecido desde una barrera en tendido de capotes. Morante al verla hubo de acordarse de su abuelo, el buen aficionado trianero 'Campito', en cuya memoria brindó a su nieta la muerte del toro. 'Campito' fue uno de los descubridores de José Antonio, y dicen que la persona en la que está inspirado el personaje principal de la serie taurina española de finales de los 80, 'Juncal'.

Comenzó la faena en el tercio con ayudados por alto acariciando la embestida del astado. Por la falta de raza de su enemigo no lograba meterlo en los vuelos de la franela... hasta que lo consiguió, endosándole una serie de cuatro derechazos aderezados con las virtudes de temple y lentitud. El cuarto fue un auténtico costero, cambió la carga de la suerte a medida que el astado recorría terrenos que eran de su jurisdicción, dando una lección de cómo se lleva toreado de principio de fin de muletazo. Remató la tanda con uno de pecho que fue totalmente una columna salomónica... Al finalizar esta serie Madrid se rompió las palmas al son de la bulería del toreo de José Antonio y fue cuando se nos sobrevinó el 'Síndrome de Stendhal', que es una especie de coma artístico del que citó textualmente su definición: es una enfermedad psicosomática que provoca un elevado rítmo cardíaco, vértigo, confusión e incluso alucinaciones cuando el individuo es expuesto a una sobredosis de belleza artística, pinturas y obras maestras del arte.

La faena después de esto se fundamentó en tesón, pureza dando el pecho y pasión en las caricias de franela que Morante consiguió sacar a un toro rendido también a sus plantas.

Mató de pinchazo y estocada desprendidilla que le fueron suficiente para recoger una oreja con lágrimas de azahar en sus ojos que llegaron a limpiar la sangre con la que manchó sus Alamares de Pasión. Nos gustaría haberlo visto salir por la Puerta Mayor de la Monumental, pero nos conformamos con la vuelta al ruedo que dio en loor de multitudes, puesto que, al fin y al cabo, las orejas son despojo.

A la salida de la plaza Madrid se entregó a Morante como Morante se entrega a Madrid cada vez que hace la señal de la cruz con el pie en el albero venteño.

Manzanares y Pinar también deberían estar contentos, pues asistieron a la obra de arte que creó su compañero y que, a partir del 21 de Mayo de 2009, es patrimonio de la humanidad.

Si en Argentina fundaron la iglesia maradoniana, nosotros deberíamos ir asentando la primera piedra de la doctrina morantista.

Todos estos alamares de pasión aquí relatados se pueden resumir en dos sentencias: un torrente de arte, un orgasmo de toreo.

miércoles, 20 de mayo de 2009

UN MAL DÍA LO TIENE CUALQUIERA, PERO... ¿DOS SEGUIDOS?

Impotencia, agotamiento, resignación, rabia, indignación... = Mal día.

Cuando crees que no puede pasar nada para empeorar el día, sucede algo que añade al vaso una gota para rebosar y, por ende, derramar tu alma por fuera del vaso... y verlo más medio vacío que medio lleno.

Hoy nos acostamos más temprano que ayer, pero con el mismo sentimiento o pensamiento, sentimiento del ¿orina culpa?, y pensamiento de que mañana será otro día... ¿ó el mismo disfrazado, como hoy?.

P.D.: No puedo poner la autoría de la fotografía, pues no viene firmada, y de donde la he cogido tampoco lo ponía.

viernes, 15 de mayo de 2009

LA AGUJA, EL HILO Y A BORDAR

Al final no fue en unos minutos, pero es ahora, mientras veo la corrida de abono isidril, en la cual podría estar ahora mismo, puesto que me han ofrecido dos entradas de contrabarrera que he tenido que rechazar por no disponer de tiempo suficiente para organizarme.

Bueno, vamos al lío. Ayer se vivió una tarde de controversia en la Monumental de Las Ventas que marcará un antes y un después en cuanto a la calidad y categoría de la plaza se refiere. Madrid se convirtió en una plaza de carros por una tarde (o eso espero). Lo acaecido ayer fue bochornoso de principio a fin. La salida en hombros con menos fuerza y menos merecida que he visto en mi vida.

Como título mi crítica hubo en la plaza una aguja, un hilo y un bordador. La aguja fue Alejandro Bogavante que nadie supo si estuvo en la plaza, era como dice el refrán "como buscar una aguja en un... burladero".

El hilo lo puso el francesito malaleche Castella, que lo engarzo a los pitoncitos de sus enemigos, que, ¡qué casualidad!, fue el mejor lote de la tarde. El señorito francoandaluz se tiró toda de la tarde destoreando, es decir, citando con el pico y de perfil totalmente, y sobre todo, descargando la suerte, retrasando la pierna contraria. Los del clavel decidieron otorgarle el inmerecido premio de una oreja, a sabiendas de las malas artes ejecutadas en la suerte suprema, sobre todo en su segundo, al cual dio muerte con un infame bajonazo.

Y el bordador vino de La Puebla del Río, el creador, el fabricante de nuestros sueños toreros. No tuvo material para bordar con alamares de pasión lo que hubiera sido una faena antológica de haberle salido uno de los enemigos del francesito malaleche.

Todavía nos quedan cuatro cartuchos para disfrutar de José Antonio en la Monumental.

De indignante se puede calificar la censura a la que tienen sometidos digital plus al tendido siete. Aboguemos por unas retransmisiones con micrófonos abiertos.

Por ahora, en la tarde de hoy, podemos destacar la oreja que ha cortado Matías Tejela toreando un burel que le correspondía a Antonio Ferrera que fue prendido con pronóstico menos grave en su primero. Mañana daremos cuenta de la corrida de hoy.

jueves, 14 de mayo de 2009

APPLEMANÍA

Es la primera entrada que publico desde mi nuevo iPhone 3G. Espero que no sea la última. Dentro de un rato hablaré de los devenires de la corrida de hoy del abono isidril, mientras tanto, puesto que todavía no quiero sofocaciones, voy a seguir disfrutando de mi nueva adquisición.

lunes, 4 de mayo de 2009

A MI MADRE... (VOY A CONTARTE CON ESTE CUENTO)

Voy a contarte con este cuento
tal como veo y como siento
que es una mare.

Es muy cortito,
es solo un mommento.
Tú, quietecito,
y escucha atento,
Si aún no los sabes.

Esa mujer que tocaste na más que naciste,
a la primera que hablaste y primera que viste...
Ese ángelito que te tuvo dentro,
bien guardadito, como en un templo,
esa es tu mare.

Una mare es algo más que el triunvirato del amor,
de la amistad, de la verdad.
Las manos de una mare no se tocan
si no es la tierra de tu universo.

Y una mare es mucho más,
porque ante el hijo siempre se arrodillará,
y a las espinas que le puedan lastimar...
hacerlas besos.

Ella es la paz y la calma que riegan tus sienes,
y es el vacío en el alma cuando no la tienes.
Es la razón más bonita para los abrazos,
la orillita del descalzo y que el suelo no te queme.

Que ella es la niña o la vieja que tu alma retiene
y es la que nunca te deja y siempre te viene...
¡¡¡y siempre te viene!!!

La Pensadora Gaditana (2009)
Letra de Joaquín Quiñones