¿Por qué soledad y desengaño son dos palabras que van solapadas?
No hace falta entornar mis ojos para soñarte,
pero si para pararme
en los instantes tan bellos que me das,
para vivirlos doblemente.
Te necesito tanto que llego a experimentar la soledad más cruda entre la multitud.
Soledad que cuando acude destroza el alma.
Conocerte,
y no sentirte cada momento de la vida
hace que la mente se encamine,
a veces, a la locura.
Una locura de amor, que desespera.
Impotencia que consume
y hace que la serenidad se pierda;
pero enseguida, una oleada de ternura
que envían desde lo eterno,
desde las cimas del mundo,
invade mi alma
y la dulce serenidad de tu abrazo
estrecha mis entrañas.
Bucanerita
No hay comentarios:
Publicar un comentario